Ya estamos a punto de que llegue ese día, o bueno noche, donde los niños salen a pedir dulces y espantar a los papás por no poder dormir después de consumir tanta azúcar, me refiero a Halloween, Día de Muertos, … y bueno luego vienen las posadas, navidad, años nuevo, después reyes, el cumpleaños del vecino, semana santa con conejos de pascua, el cumpleaños del compañero de escuela, el verano… uffff … Como ven los niños no tienen excusa para no consumir dulces y alguna que otra cosa “nutritiva”, bien sabemos que como niños lo que más nos gusta es estar buscando como joder nuestra dentadura y a nuestros padres desde muy temprana edad, una cosa buena para los dentistas y la pintura para las canas, pero esta es otro cosa, ahora hablare del famoso mito de la hiperactividad de los niños gracias a los dulces (azúcar).
¿Es verdad que los niños se vuelven hiperactivos con el azúcar y dulces?
Como padres, vivimos en un mundo de historias, mitos, supersticiones, religiones y creencias bastante pendejas, creemos todo lo que leemos en Facebook, en las noticas y hasta en blogs… sobre todo le creemos a nuestros papás y más que nada a las abuelitas que “siempre” tienen la razón, — es que lo dijo mi abuelita 😀 pero ahora veremos si nuestras abuelitas tenían la razón de que la azúcar nos hace unos pinches demonios.
Existen muchos padres preocupados (a veces pendejos) y organizaciones de salud que creen que hay una causa – efecto, entre la relación del azúcar y el brincar como niños sin control, inclusive hay ciertas organizaciones de salud que insisten que el “gobierno”, agencias profesiones y la industria alimentaria han hecho caso omiso de la evidencia de que la dieta afecta el comportamiento. Sin embargo, la mayoría de los estudios hasta la fecha NO han encontrado una conexión, y la mayor parte de la industria médica mantiene que no existe una relación conocida entre el azúcar y la hiperactividad.
¿Pero de donde viene este mito del azúcar y la hiperactividad?
La idea de que los alimentos pueden tener un efecto en el comportamiento creció popular en 1973 cuando alergólogo Benjamin Feingold, MD, publicó «la Dieta Feingold». Abogó por una dieta libre de salicilatos, colorantes alimentarios y aromatizantes artificiales para el tratamiento de la hiperactividad. Aunque la dieta Feingold no pedía la eliminación de azúcar específicamente, muchos padres pensaron entonces que sería mejor evitar los aditivos en la comida, pero sorprendentemente un poco más tarde la azúcar refinada pronto fue objeto de escrutinio.
La realidad es que no hay evidencia científica para apoyar esta creencia.
Un estudio de 1978 publicado en la revista “Food and Cosmetics Toxicology” encontró que al aplicarle una prueba de tolerancia de glucosa a los niños hiperactivos el resultado sugería una hipoglucemia reactiva (baja azúcar en la sangre ). Hasta ahora, sin embargo, no hay buenas teorías para explicar la conexión.
Un estudio se propuso probar la expectativa de los padres que pensaban que el azúcar tenía un efecto negativo en sus hijos (3). En el experimento, a la mitad de las madres se les hizo creer que sus hijos estaban tomando algo azucarado. A la otra mitad, le revelaron que las bebidas contenían un endulzante artificial, no azúcar.
Cuando se les pidió que observaran y calificaran la conducta de sus hijos, las que pensaban que habían consumido azúcar dijeron que estaban más hiperactivos que las que sabían que habían tomado un placebo.
Pero hubo otro truco en el estudio. Mientras las madres estaban observando a sus niños, los investigadores las estaban observando a ellas. Notaron que las madres que creían que sus hijos habían tomado demasiada azúcar no sólo los criticaban más, sino que se mantenían más cerca de ellos y los observaban con más ahínco.
Así que la presunta azúcar no había cambiado la conducta de los niños sino la de las madres. (mas aquí)
En los últimos 10 años, varios estudios han examinado los efectos del azúcar en el comportamiento de los niños. Un análisis de los resultados de todos estos estudios fue publicado en el 22 de noviembre de 1995 cuestión de la Revista de la Asociación Médica Americana (Journal of the American Medical Association). Las conclusiones de los investigadores fue que el azúcar en la dieta no afectó el comportamiento de los niños. Los autores no señalan, sin embargo, que los estudios no descartan por completo que el azúcar podría estar teniendo un efecto leve en un pequeño número de niños.
Las expectativas pueden afectar la percepción, o sea sesgo de confirmación.
A pesar de estas investigaciones, ¿por qué todavía muchos padres creen que el azúcar hace hiperactivos a los niños? Algunos investigadores sugieren que simplemente los padres están esperando que el azúcar afecte el comportamiento de su hijo, de esta manera esto puede influir en la forma de interpretar lo que ven, es conocido como «sesgo de confirmación», o sea que los padres están esperando ver cierto comportamiento y cuando lo ven, en este caso, se lo atribuyen a la azúcar. Un estudio publicado en agosto 1994 “Journal of Abnormal Child Psychology” demostró que los padres que creen que la conducta de un niño se ve afectado por el azúcar son más propensos a percibir a sus hijos como hiperactivos cuando han sido llevados a creer que el niño acaba de tener una bebida azucarada.
Si tú sigues creyendo que los niños se vuelven hiperactivos y andan saltando paredes, tirando tu casa, que parece que no los cansas nunca después de una fiesta, no es por el azúcar ni lo que comieron, es porque están muy felices de andar con sus amigos, no hay mecanismo conocidos del azúcar que tengan alguna reacción en el cerebro, por ejemplo, acaso ustedes han visto a una persona con diabetes andar brincando, les recuerdo, ellos no pueden controlar los niveles de azúcar en la sangre, en cambio un niño normal si, pero eso sí, si se les ocurre dar CAFÉ entonces seguramente si se parecerán al demonio de Tazmania, ya que el café si tiene un cambio en el cerebro, que es donde viene esta hiperactividad.
¿Pero qué consecuencias tiene el azúcar?… ayuda a la GORDURA, México tiene el gran “orgullo” de ser el país más gordo del mundo, tenemos el percápita más alto en consumo de refresco, por ejemplo veo a mis vecinos como van por su Coca para el desayuno diario, al igual que millones de Mexicanos lo hacen, no le echen la culpa al azúcar de que sus niños estén hiperactivos, pero si échense la culpa ustedes mismos por ayudarlos a tenerlos gordos.
- http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/ency/article/002426.htm
- http://www.webmd.com/parenting/features/busting-sugar-hyperactivity-myth
La creencia en la supuesta relación entre la azúcar y la hiperactividad, se produce en buena medida porque “azúcar” o “azúcares” son los términos comunes para referirse al contenido de la categoría de carbohidratos en los alimentos.
A su vez, los carbohidratos se entienden como esa energía que el metabolismo deja más rápidamente disponible en el cuerpo y la que en efecto esta utiliza en primera instancia. Hasta cierto punto tiene sentido, sin embargo no todos los carbohidratos tienen tal efecto de “energía inmediata”. Según entiendo hay alimentos clasificados como con alto contenido en carbohidratos que efectivamente producen una subida de glucosa en la sangre en forma acelerada, pero también hay otros que se absorben y se metabolizan más lentamente.
Con los estudios que mencionas, queda claro que la azúcar, que tanto adoran los chamacos, no necesariamente estaría catalogada en ese tipo de carbohidratos de absorción más lenta (al menos así lo demuestran los citados estudios de glucosa en los chicos), pero sí que con el tiempo se convierte en altas reservas de energía en forma de grasa.
Excelente artículo para no desviar la atención sobre el verdadero problema en el abuso de la azúcar. ¡Saludos!
Corrijo: “Con los estudios que mencionas, queda claro que la azúcar, que tanto adoran los chamacos, no necesariamente estaría catalogada en ese tipo de carbohidratos de absorción más lenta…” <— quise decir, "de rápida absorción".
No, no es el azucar la que causa la hiperactividad. Pero si la cafeína del refresco, es bastante.
De acuerdo Luis, pero este mito se refiere a los dulces (azucar), si hay coca en una fiesta esto podría ayudar a la hiperactividad, como dato curios te dejo esto:
Cafeína en una taza de cafe: 95mg
Cafeína en un vaso de Cola: 39mg
Así que mejor evita coca en las fiestas infantiles si no quieres niños colgado de las paredes 😀
jaja, si así es. No la recomiendo en lo absoluto para los niños, precisamente por su peso y estatura les afecta más, si un niño de 20 kilos se toma una lata de refresco es como si un adulto se tomara 4. te imaginas? mejor cualquier otro refresco de sabor, igual yo siempre he pensado que el azúcar da un subidón de energía pero no es prolongado, así que no creo que sea más peligroso, más que para el hígado jajaja
Entonces a evitar las gaseosas que están llenas de gas carbónico, cafeína, ácido fosfórico y sobre todo azúcar ; Una gaseosa de 600 ml tiene 318 g de azúcar lo que es aproximadamente 11 cucharadas. Con un exceso de calorias consumidas y no UTILIZADAS se guarda como grasa corporal = obesidad = enfermedades asociadas.
Se que los niños tienen un desborde de energía natural (sino no serian niños) , pero toda esa energía hay que encaminarla en actividades físico-recreativas-deportivas y controlando lo que COMEN Y BEBEN disminuiría los indices de obesidad.
Mencionas en tu escrito esto: “no hay mecanismo conocidos del azúcar que tengan alguna reacción en el cerebro” pero yo en un articulo de la revista National Geografic encontré esto: “Si el azúcar es tan malo para nuestra salud, ¿por qué nos gusta tanto? La respuesta breve es que una inyección de azúcar en el torrente sanguíneo estimula en el cerebro los mismos centros del placer que responden a la heroína y la cocaína. Todos los alimentos sabrosos lo hacen (¡por eso nos gustan!), pero el azúcar tiene un efecto muy pronunciado. En este sentido, es una droga adictiva.” esto me llevo a preguntarme ¿quien tiene la razón? te dejo el link para que lo leas completo: http://www.nationalgeographic.com.es/articulo/ng_magazine/reportajes/8485/pasion_por_azucar.html?_page=2